la casa del diezmo

La Casa del Diezmo en Celaya siempre se ha visto rodeada de una gran cantidad de mitos y leyendas… Esta es solo una de ellas….
Las doce y todo sereno!!!!! Se escuchó el grito que el centinela daba al llegar a la intercepción formada por lo que hoy son las calles de Nicolás Bravo y Benito Juárez.
Ahh ya son las doce pensó el velador de la vieja casona mientras se persignaba tal como se acostumbraba en aquella época, y se apresuraba a cerrar el portón de la Casa del Diezmo en Celaya, pero mientras se agachaba para recoger la viga para atrancarlo vio pasar tras de el a una mujer vestida de negro, que se introducía al recinto.
Condenada vieja pensó, seguramente es la que nos ha estado robando, pero ya vera cuando la denuncia con los de la ronda….
El hombre corrió por uno de los pasillos laterales con el fin de cortarle paso ya que la mujer se dirigía hacia el patio posterior, pero basto un instante para que la mujer desapareciera entre las sombras que proyectaba la luna llena…. ¿Qué había pasado? El hombre no lo comprendía y al dirigir su mirada hacia la parte final del patio la volvió a ver.
¡¡Detente en el nombre de dios!! –le grito el hombre mientras corría hacia donde estaba, pero al irse acercando noto algo raro… los pies de la mujer no estaban tocando el piso…
-Virgen santísima es un fantasma-!! Y con una velocidad de cual ni el mismo sabía que le era posible alcanzar corrió hasta la puerta de la entrada, volvió a quitar la tranca del portón para salir corriendo por la calle de la Compañía de Jesús (Juárez) gritando…
-¡En la casa del Diezmo hay un fantasma!¡ ¡En la Casa del Diezmo hay un fantasma!¡ ¡¡yo lo vi ¡! ¡¡ yo lo vi!-
Pues bien aquella espeluznante aparición fue echada al olvido y paso a formar parte del folklore de Celaya, pero durante mucho tiempo nadie se atrevía a pasar en noches de luna llena cerca de la casa del Diezmo.
Fue nuevamente hasta finales de los años 70´s cuando un hecho extremadamente sorprendente ocurrió en ese sitio y que revivió el interés de la gente por aquella leyenda….
Se encontraba un grupo de estudiantes de teatro en una de las aulas de dicha casa ensayando para la puesta en escena de una obra que estaban próximos a estrenar, tenían ya rato esperando a que llegara su maestro por lo que comenzaron a aburrirse… hasta que uno de ellos propuso que se pusieran a jugar a ouija a los que los demás aceptaron de buena gana –Al fin el profe ni ha llegado-..
Apenas habían comenzado a jugar la tabla comenzó a moverse como si cobrara vida propia, los alumnos se miraban unos a otros incrédulos, hasta que los regreso a la realidad la voz del maestro que había entrado al salón sin hacer ruido haciéndolos saltar del susto……. Se molestó al verlos jugar y no estudiar sus parlamentos .. Tenían el tiempo encima para la presentación.
-Muy bien les digo como veo que tiene tiempo para estar jugando, supongo que ya tienen bien ensayadas sus líneas, así que ahora yo no les diré lo que deben de hacer o decir, ni a qué hora entrar o salir a ver si son tan buenos como lo son para andar invocando fantasmitas.
Los muchachos avergonzados guardaron la tabla y se pusieron a practicar, el maestro al notar sus caras largas y ver las constantes equivocaciones de sus alumnos les pidió que pararan la escenificación.
-Miren vamos a comenzar relajados y sin enojos, es más vamos a hacer un ejercicio para relajarnos.
El profesor les dio instrucciones de tenderse en el piso y les puso una música suave y relajante.
-Ok todos cierren los ojos… respiren profundo por la nariz y suelten el aire muy lentamente…
El profesor iba a comenzar de nuevo el ejercicio cuando uno de sus alumnos se levantó de repente como impulsado por algún resorte invisible volteo a ver a sus compañeros los cuales creyeron que estaba jugando; los miro uno por uno y cada uno de ellos sintió un frio que les helaba los huesos mientras el aula se llenaba de una extraña neblina.
Por un momento sus compañeros creyeron que se trataba de una broma pero al hablar su voz sonaba extraña y por muy buen actor que fuera su voz era la de una mujer, se dirigió hacia la pared del lado izquierdo y la comenzó arañar mientras decía algunas palabras raras, otra de las chicas del grupo entro en estado de histeria y comenzó a gritar…
-Deténgalo, deténganlo, por favor!!! el joven arañaba tanto que ya se había provocado heridas en los dedos, la otra chica tomo uno de los martillos de la utilería y comenzó a golpear la pared en la zona en que le joven arañaba, de pronto él se alejó un poco y comenzó a darle un ataque parecido a los epilépticos.
-Los hombres ayúdenme, las mujeres despejen el área -grito el maestro que seguía blanco por el susto, el muchacho quedo inconsciente y lo sacaron al patio central, la casa del Diezmo que comenzó a llenarse de gente curiosa que preguntaba y cuchicheaba sobre un rumor que desde hace muchos años se sabía en todo Celaya y que hasta ese memento creían olvidado.
-Es cierto, volvieron a ver a la mujer de negro… a la de las cadenas.. el fantasma de la casa del diezmo… comenzó a expandirse el rumor como reguero de pólvora.
A la semana siguiente el profesor mando traer a un especialista el cual a su vez invito a más gente que se desarrollaba en el ámbito paranormal los cuales junto a la gran cantidad de curiosos provocaron que Celaya se convirtiera en la meca provisional de parasicólogos, lingüistas y de todos aquellos que gustan hacer de lo obscuro una forma de vida.
El especialista quiso repetir la experiencia pero al intentar que el joven entrara al aula le dio un ataque parecido al interior, y no les quedo más remedio que hipnotizarlo por medio de la regresión para hacerlo repetir la experiencia vivida, ya adentro de la habitación el joven comenzó a gritar y a decir cosas en un idioma que no comprendieron y no fue hasta que llevaron la grabación a los lingüistas que determinaron que se trataba de vascuence del siglo XVII y decía lo siguiente……..
-Ayúdenme, sáquenme de aquí por favor!! Sáquenme!! junto a mi hay dos cofres.. uno lleno de plata que será para la persona que me saque…. Y otro lleno de oro el cual debe ser llevado a San Francisco para que se digan misas por mí y por los que me dejaron aquí sáquenme por favor ayúdenme!!!!-
Extrañamente a los alumnos y maestros les dieron vacaciones forzadas sin tener algún argumento válido, y cuando regresaron dos semanas después el aula tenia parches en toda la pared y el piso, como si alguien hubiera estado buscando algo, dicen que no encontraron nada de dinero… pero uno de los veladores aseguro que sacaron una osamenta que tenía restos de habito de monja, así como grilletes en las manos y en los pies y que se la habían llevado para enterrarla en el panteón norte de la ciudad en una tumba sin nombre pues nadie lo sabía…. esa tumba existe y como epitafio únicamente tiene escrito 1978.
Dicen que en la actualidad en la noches de luna llena, aun se puede ver deambulando entre los pasillos de la vieja caza de Diezmo la silueta de aquella mujer, esperando a que por fin alguien descifre el misterio que le permita encontrar el descanso eterno………..

1 comentarios:

Anónimo dijo...

interesante el relato, pero que paso con los estudiantes teatrales, porque de ellos no se dice nada

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